Psalm: 8
Reading II: Romans 5: 1-5
Gospel: John 16:12-15
When we express ourselves through words, actions, attitudes, music, art, dance or even silence, we are revealing who we are. From the beginnings, ancient peoples were able to learn about their Creator by observing His creations.
Whether it was the sun giving light and warmth or the rain providing the moisture to refresh the earth, its animals and its people, they could recognize the care of the Creator. The fertile ground and the waters of the world providing food for sustenance were also recognized as welcomed signs of this providence.
When Jesus came as a human to be our Emmanuel (God with us), we were given the gift of being able to have a deeper understanding of our God. By observing and listening to Jesus we learn that God’s love is unconditional. We know that God is
a forgiving God. We also discover that God is not far off somewhere. He is present to us.
Finally, from Jesus, we learn about the trinitarian nature of God. We hear Jesus frequently talking about his Father. He promises to send the Holy Spirit to the disciples to guide and strengthen them. He also speaks of their unity.
When preaching to the people of Ireland, St. Patrick used the shamrock to teach the trinitarian concept. The three leaves on the single clover served as a simple illustration for his preaching.
However, God’s creation of the family is probably a more accurate metaphor [implied comparison] for the Trinity because of the intimacy of the relationships. Father, mother, and child share on a deep level. Jesus preaches that the Father, Son, and Holy Spirit are one.
Jesus uses male images like the father in the “Parable of the Prodigal Son” to show the unconditional love of God (Luke: 15:11-32). Then, He uses a female image when he weeps oven Jerusalem saying: “You kill the prophets, you stone the messengers God has sent you! How many times I wanted to put my arms around all your people, just as a hen gathers her chicks under her wings, but you would not let me! And so your Temple will be abandoned.” (Luke 13:34).
When Jesus was giving His last instructions to the disciples, He gathered them on a hill in Galilee and said to them, “I have been given all authority in heaven and on earth. Go, then, to all peoples everywhere and make them my disciples: baptize them in the name of the Father, the Son, and the Holy Spirit, and teach them to obey everything I have commanded you. And I will be with you always, to the end of the age.” (Matthew 28:18-20).
The baptized person has a seal (mark) on his/her soul which designates to whom he/she belongs. It also indicates the close bond of unity between the person and God. Finally, it signifies his/her call to invite others to share fully in the holy life of the Trinity.
Reflection Question: How have I already invited people to learn about God? How can I invite people to learn about God in the future?
Spanish Translation of Reflection Above...
Fiesta de Pentecostés
Cuando nos expresamos a través de palabras, acciones, actitudes, música, arte, danza o incluso silencio, estamos revelando quiénes somos. Desde los comienzos, los pueblos antiguos pudieron aprender acerca de su Creador al observar Sus creaciones.
Ya sea que el sol diera luz y calor o que la lluvia proporcionara la humedad para refrescar la tierra, sus animales y su gente, podían reconocer el cuidado del Creador. La tierra fértil y las aguas del mundo que proporcionan alimento para el sustento también fueron reconocidas como signos bien recibidos de esta providencia.
Cuando Jesús vino como un ser humano para ser nuestro Emanuel (Dios con nosotros), nos dieron el don de poder tener un entendimiento más profundo de nuestro Dios. Al observar y escuchar a Jesús, aprendemos que el amor de Dios es incondicional. Sabemos que Dios es un Dios perdonador. También descubrimos que Dios no está lejos en algún lugar. Él está presente para nosotros.
Finalmente, de Jesús, aprendemos sobre la naturaleza trinitaria de Dios. Escuchamos a Jesús frecuentemente hablando de su Padre. Él promete enviar el Espíritu Santo a los discípulos para guiarlos y fortalecerlos. También habla de su unidad.
Al predicar a la gente de Irlanda, San Patricio usó el trébol para enseñar el concepto trinitario. Las tres hojas en el trébol solo sirvieron como una ilustración simple para su predicación.
Sin embargo, la creación de la familia por parte de Dios es probablemente una metáfora más precisa [comparación implícita] para la Trinidad debido a la intimidad de las relaciones. Padre, madre e hijo comparten en un nivel profundo. Jesús predica que el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo son uno.
Jesús usa imágenes masculinas como el padre en la “Parábola del Hijo Pródigo” para mostrar el amor incondicional de Dios (Lucas: 15: 11-32). Luego, usa una imagen femenina cuando llora en el horno de Jerusalén diciendo: “¡Matas a los profetas, apedreas a los mensajeros que Dios te ha enviado! ¡Cuántas veces quise poner mis brazos alrededor de toda tu gente, así como una gallina junta sus polluelos debajo de sus alas, pero no me dejaste! Y así tu templo será abandonado”. (Lucas 13:34).
Cuando Jesús estaba dando sus últimas instrucciones a los discípulos, los reunió en una colina en Galilea y les dijos: “Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra. Ve, entonces, a todos los pueblos en todas partes y hazlos mis discípulos: bautízalos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, y enséñales a obedecer todo lo que te he mandado. Y estaré contigo siempre, hasta el final de la era”. (Mateo 28:18-20).
La persona bautizada tiene un sello (marca) en su alma que designa a quién pertenece. También indica el estrecho vínculo de unidad entre la persona y Dios. Finalmente, significa su llamado a invitar a otros a compartir plenamente en la vida santa de la Trinidad.
Pregunta de Reflexión: ¿Cómo ya he invitado a la gente a aprender acerca de Dios? ¿Cómo puedo invitar a las personas a aprender acerca de Dios en
el futuro?
Stephanie Morris, Ph.D. Historian, Certified Archivist, Emerita
Ya sea que el sol diera luz y calor o que la lluvia proporcionara la humedad para refrescar la tierra, sus animales y su gente, podían reconocer el cuidado del Creador. La tierra fértil y las aguas del mundo que proporcionan alimento para el sustento también fueron reconocidas como signos bien recibidos de esta providencia.
Cuando Jesús vino como un ser humano para ser nuestro Emanuel (Dios con nosotros), nos dieron el don de poder tener un entendimiento más profundo de nuestro Dios. Al observar y escuchar a Jesús, aprendemos que el amor de Dios es incondicional. Sabemos que Dios es un Dios perdonador. También descubrimos que Dios no está lejos en algún lugar. Él está presente para nosotros.
Finalmente, de Jesús, aprendemos sobre la naturaleza trinitaria de Dios. Escuchamos a Jesús frecuentemente hablando de su Padre. Él promete enviar el Espíritu Santo a los discípulos para guiarlos y fortalecerlos. También habla de su unidad.
Al predicar a la gente de Irlanda, San Patricio usó el trébol para enseñar el concepto trinitario. Las tres hojas en el trébol solo sirvieron como una ilustración simple para su predicación.
Sin embargo, la creación de la familia por parte de Dios es probablemente una metáfora más precisa [comparación implícita] para la Trinidad debido a la intimidad de las relaciones. Padre, madre e hijo comparten en un nivel profundo. Jesús predica que el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo son uno.
Jesús usa imágenes masculinas como el padre en la “Parábola del Hijo Pródigo” para mostrar el amor incondicional de Dios (Lucas: 15: 11-32). Luego, usa una imagen femenina cuando llora en el horno de Jerusalén diciendo: “¡Matas a los profetas, apedreas a los mensajeros que Dios te ha enviado! ¡Cuántas veces quise poner mis brazos alrededor de toda tu gente, así como una gallina junta sus polluelos debajo de sus alas, pero no me dejaste! Y así tu templo será abandonado”. (Lucas 13:34).
Cuando Jesús estaba dando sus últimas instrucciones a los discípulos, los reunió en una colina en Galilea y les dijos: “Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra. Ve, entonces, a todos los pueblos en todas partes y hazlos mis discípulos: bautízalos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, y enséñales a obedecer todo lo que te he mandado. Y estaré contigo siempre, hasta el final de la era”. (Mateo 28:18-20).
La persona bautizada tiene un sello (marca) en su alma que designa a quién pertenece. También indica el estrecho vínculo de unidad entre la persona y Dios. Finalmente, significa su llamado a invitar a otros a compartir plenamente en la vida santa de la Trinidad.
Pregunta de Reflexión: ¿Cómo ya he invitado a la gente a aprender acerca de Dios? ¿Cómo puedo invitar a las personas a aprender acerca de Dios en
el futuro?
Comments:
Stephanie Morris, Ph.D. Historian, Certified Archivist, Emerita
“And Jesus began to do and teach.” Note that Jesus invited others to follow Him first by “doing” and then by teaching. Mother Katharine noted that we should “Love not in word, but in work.” We can interest others in learning about God by living God first – doing what God asks each one of us to do. If others can see God in us, they might become interested in knowing more
about God.
about God.
Pat Chiaffa, ASBS
I admit, I have not done a very good job of inviting others to learn about God. This week’s reflection question has identified a weakness I did not consider before. I can, however, testify to the joy of receiving such an invitation. I have received and accepted many invitations. Doing so has been a life-changer.
One of the women in my Scripture Sharing Group, who is also a fellow Associate of the Sisters of the Blessed Sacrament, has invited me to her home several times to watch Scripture-Based videos and programs led by various spiritual leaders. She, herself, leads Bible Studies and Spiritual discussions which I attend in response to her invitation to join.
When she learns of spiritual events, she eagerly shares the information with others and organizes a group of us to attend. We have celebrated our faith and enjoyed fellowship at day and weekend retreats. As a result of sharing these spiritual activities together, we have grown into a family-like group, sharing joyful times as well as sad and difficult experiences.
She posts uplifting spiritual reflections on Facebook, and it is always warming to open an email and find an inspirational picture or quote. Her whole being radiates the love of Jesus. I have had the pleasure of hearing her communicate with her adult children and she is like a well- calibrated compass always pointing them to faith and trust in God!
She is a talented, skilled hair stylist who, in addition to making women look and feel physically attractive, uplifts their spirits by getting them in touch with their beautiful interior, true selves.
A former teacher, she helped empower her young adult students to recognize the presence of God in their lives, enabling them to co-create the life they desired. She is a prayer warrior! Once you make it on her list, consider the request taken care of.
This is only a partial listing of her “being of light” mode of operating. She is a model disciple of the Lord, ever ready to embrace the opportunities that God presents in her life. God’s love flows through her to others with ease and grace.
I intentionally left this incredible woman unnamed because she would not like the honors. She is an example for me to follow. It is my hope that I will become courageous enough to extend invitations to others that they may grow in the faith and come to know Jesus more intimately.
Thank you, Heavenly Father, for my dear friend who continues to inspire and remind me of the joy that comes from knowing and sharing the good news of Your love with others.
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